jueves, 7 de junio de 2007

ACALLADA LA UNIVERSIDAD PÚBLICA... Estudiantes inconformes por medidas tomadas

Infortunadamente la administración universitaria ha decretado las vacaciones sin escuchar los avances obtenidos (si los hay) por la comisión conformada para explorar y negociar salidas a la problemática actual de la UN. Una vez más pudimos darnos cuenta de que primaron las salidas autoritarias frente a la concertación y el diálogo.

Como es usual las autoridades estatales y universitarias prefirieron el desalojo de varias de las universidades del país, en especial de la del Cauca, la de Manizales y, por supuesto, de la Nacional. Por eso vimos con extrañeza cómo el martes 5 de junio fueron cerradas las puertas de la UN Bogotá, gracias a las vacaciones a que nos ha mandado el Rector como una vía expedita para acallar de tajo la expresión de la comunidad universitaria y especialmente de la asamblea triestamentaria programada para las 10 de la mañana de tal día.

Durante los últimos días la universidad acoje en sus entradas algunos escuadrones antidisturbios de la Policía Nacional. Es una pena que hayan acallado así a los estudiantes. Que no se hubiera llegado a un acuerdo sobre la terminación flexible del actual semestre. Que ante la problemática las directivas hayan tomado tales decisiones.

Asimismo es insentata la actitud gubernamental frente al hecho de seguir vinculando inpúnemente a los estudiantes de la UN como "terroristas". Aquí somos más de 40 mil estudiantes y en esa medida es difícil que no haya dentro de la universidad misma un sector radical; tal como en la nación colombiana; o como corresponde a la parte del gobierno vinculada al radicalismo derechista -que ha sido espeluznante en algunas de nuestras regiones.

Por lo apreciado en estas últimas semanas nuevamente las posiciones intransigentes, tan criticadas por todos, pero tan practivadas por algunos, han puesto un manto de obscuridad sobre la capacidad crítica y comprometida de los estudiantes de la universidad nacional colombiana. Los desalojos forzados acometidos en las universidades antedichas son también una muestra más de la capacidad estatal para sofocar el análisis y las manifestaciones públicas de la comunidad universitaria -en asambleas triestamentarias e interfacultades y otros espacios de discusión- frente a otros temas tan delicados como el espionaje telefónico masivo, que según dicen algunos supera las 8 mil horas de grabación ¿tanto o más para qué? Eso es lo que no sabe el país.

También podrían haberse cerrado espacios de concienciación sobre los retos implicados en los tratados comerciales que actualmente se negocian en nuestro país. En fin. Sobre otros muchas cosas más que los medios no visibilizan. "Cosas" Que no importan ahora en las agendas políticas, que únicamente parecen estar enfocadas en cómo obtener su cuota burocrática para las próximas elecciones y no en asegurar un futuro digno para toda la población colombiana.

Es un despropósito trasladar la financiación de la educación pública a sus egresados mientras no se tenga un sistema de protección social adecuado para asegurar el empleo y el bienestar. Por eso como estudiantes no hemos estado de acuerdo, entre otros, con el artículo 6 del Plan Nacional de Desarrollo, en su numeral 3.3, llamado "Sistema de Protección Social", donde leemos:

"De igual forma, se reducirá la tasa de analfabetismo, se aumentará la cobertura bruta en educación superior, principalmente a través de la expansión de la matrícula técnica ytecnológica, y la creación de un fondo para la financiación de la educación superior, quepodrá contar con recursos provenientes de la contribución de los egresados deuniversidades públicas; y disminuir la deserción de la educación básica y media del sectoroficial y la de educación superior."

El compromiso de la concurrencia y otros artículos, que definitivamente agotan cada día más la financiación de la universidad pública, requieren de un compromiso decidido que no debe desatender la administración universitaria.

En ese sentido se ha pronunciado la asamblea que logró reunirse el martes después de encontrar la universidad cerrada; en la web "UN en asamblea permanente" (unbogota.tripod.com) han xigido la renuncia del Rector por su solapada manera de tomar medidas frente a un movimiento que realmente se caracterizó por su pacifismo, no obstante el apresamiento de algunos estudiantes o la desaparición (como se informó en una de las primeras asambleas) de un estudiante de la Universidad Industrial de Santander.

¿Para qué entonces pensar en la U.? Mucho menos en país. ¡Qué se jodan los que vengan! ¡Que paguen el plato roto! Tal parece ser la consigna de quienes siguen pensando en la bondad de un sistema que privatiza la deuda pública, desembarazándose campantemente de su responsabilidad constitucional; del interés general. Aquí ahora es más apreciada una bala para el fusil que una docena de lápices contra la ignorancia y el subdesarrollo inventado por los economistas del Banco Mundial.

4 comentarios:

vulturno dijo...

Acoger no se escribe así. Una respuesta aquí.

Unknown dijo...

Los estudiantes de la Universidad de Antoquia están buscando crear un movimiento imparcial. Ver AlternaUDEA http://alternaudea.blogspot.com/

Unknown dijo...

No todos los estudiantes de la Universidad Nacional aceptan a la asamblea y sus decisiones como representate de la comunidad académica.

Visite:
http://donequis.blogspot.com/

Alejandro Jaramillo dijo...

Sigo en actividad...