Infortunadamente nuestra institución no tiene un campus apropiado a las circunstancias regionales existentes en nuestro país. Porque si pensamos en una concepción regional que se compadezca con el molde nacional necesariamente creemos que el campus de la Universidad Nacional de Colombia en Bogotá se queda corto para la aplicación de un esquema serio en materia de investigación y desarrollo de la biodiversidad existente en muchas tierras de la periferia.
Mientras la sede de Leticia, que podría tener un campus a la par con los mejores del mundo, no implemente de un plan efectivo en elevar la calidad de la educación superior, acorde con los retos que plantea este nuevo milenio, entonces la ciencia a producir sobre nuestros propios ecosistemas podría tener un atraso como el de los años 1950s. No se debe olvidar que muchos esquemas de "modernización" han demostrado fracasos evidentes en cuanto a resultados en materia de educación y conocimientos superiores, por no hablar aquí también de su aplicación en beneficio de cada una de las territorialidades, tan diferentes y a la vez similares en sus componentes biofísicos y humanos. Con derecho a tener una universidad digna para nuestro pueblo y sus aspiraciones de bienestar.
Según Víctor Leonardi, existe un adagio en el Amazonas brasilero que señala que "Dios es grande, la selva es mayor", expresión indicio de lo que significa el conocimiento que podemos obtener de la infinita diversidad de vida existente aún en los bosques tropicales. Naturaleza y sociedad son ambas caras de esa grandeza, aún tan ignorada por los mismos patriotas.
Sin embargo la inmensidad de bosques que todavía existen deben animar la estrucutración de un campus acorde a las exigencias que las universidades tienen en lo relativo a la ciencia y la tecnología. De tal manera, son desacertadas formas en las cuales se conciben y aplican las leyes en medio de la desigualdad más injusta para con las mismas regionales "constituyentes" de la nacionalidad. Si poco fomento de la educación superior, la ciencia y la tecnología hace Bogotá en el nivel público, en la Colombia rural se puede decir que esta cuestión está apenas en pañales (y pensando en que "todo el mundo" está conectado, a semejanza de cómo lo puede estar en Bogotá, el burócrata desconoce los más legítimos derechos de seguridad social con cobros electrónicos, tan fáciles en el centro, pero tan complicados y azarosos en las periferias.
¿Si estamos hablando de ecosistemas tan importantes para el planeta tierra como las selvas húmedas tropicales, por qué aún no está en funcionamiento en la región algún doctorado universitario oficial en algún tema relacionado con este tipo de vida? ¿Habrá que esperar que tanta información y recursos naturales sean estudiados, documentados y hasta manejados únicamente por otros países, que sí lo están haciendo? ¿O se puede hacer de las áreas rurales colombianas, lugares de dignidad y ejemplo, para la constitución de un mayor bienestar y una mejor ciencia?
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